Me encaprichocon tu estimar y enojo. Soy la enfermaque sana con la voz del prometido. Sólo tu voz es dulce, poesía,por el hecho de que por ella he sido yo contada.Con tierna obstinación tus ojos ponesdonde clavé, derrotada, mi mirada.Ahora te mandaron a morir, mas túcomo una flor del campo te levantas.La hoguera preparada para tien tus lozanos pétalos se lava.Porque eres mustia entre las bestias todas y cada una,garza de invierno, yo te siento hermana. No dejes de compartir estos románticos poemas de amor para novios pues todos necesitamos mantener alegres el corazón. Puedes localizar este poema en el libro Los versos del Capitán (Moderna).
A mi gran vivienda llegasy bebes de mi boca bien servida.¿Escuchas? ¿Ves las gaviotas vueltas dando al día? Mis dedos te recorren pues se animan.
A Mi Amor Por Las Citas De Mi Vida
Puede que no sean tus propias palabras, pero son espectaculares para expresar tu amor de la forma más fácil pero dulce posible. Son ya las altas horas de la noche.Un pájaro fantasmal el vuelo alza.Se hunden sus graznidos como piedrasen las heladas aguas de mi alma.Al monte me llevaba algunas tardesmi apasionado, y tras su sombra aleteaba.¡Los besos como llaves diferentespara mi amor de enero y rosas blancas! Después aquel aliento de desdichao el odio en su guarida de expresiones.En este momento esta afición de no vivir,de proceder a mi entierro y ser las dos campanastocando en el oído de las floresque caen como plumas de las ramas.
Ay, mis esposos, todos mis espososse fueron a la mar, ayer, mañana.Guardé sus blancas ropas, la fortunade pobres con que hicimos las moradas.Viuda me quedé. Vestí de lutoy fui por pueblo esquivo saludada.Un perro, la comida justa, un lecho,es todo cuanto tengo por cordura,porque al romperse el viento de la noche,los búhos al rezar, y andar la lluvia,qué loca voy diciendo por las callesverdades, si vestida, mal desviste. Esta manera de quemarme el alma,este morirme sin haber sangrado,esta práctica perra de quererte,este quedarme entera en tu costado. Tus ojos, 2 secretos que me observan.Mas, ¿qué dolor es este que en mi frentetan pálida, semeja algún lunar? Sobre tus hombros inclinar mi rostro.Un lirio aún vivo que encontré, contarte.Soy la culpable de tus versos lúgubresdonde una llama ciega y negra arde.«El pino en las neblinas» es un verso,y todo cuanto muere o cuanto nace,la ropa de la flor, la carne blancade las orquídeas que al amor se abren. Mi reino es de los astros enigmáticos,del fuego que murmura en el ocaso.Se me figura milagrosa telael cielo con su azul iluminado.Conmigo no es el hombre sino el ángel.Su sombra se hace mies en mi costado.Él busca de mi luz el santo nortecomo la brisa en el momento en que es mi rebaño.
El Cariño Es Silencio
Él hizo mi mirada distraída,la llamarada añil de tu silencio,las seis en punto y el adiós mucho más mustiofrente a las olas rubias de aquel puerto.Él logró las primeras golondrinas,el frío de esa tarde y aquel miedode que llegaras tarde o no llegarascuando era una chavala más del viento. Si un vendaval enreda mis cabellosenfermo de una fiebre que es disparidad,me quema la cara la melancolía,y ahora me da por fallecida un ave obscura.Estando inmóvil, una solitariaestrella baja sobre mi cintura.Y doy a luz a niños cenicientosque a medianoche arropo con la niebla. Mi alma atardecida busca el fuegode los caminos breves de tu manodonde quedó la boca de mi beso.
Soy esa eterna arena de los ríos.Por mi dolor los dioses se apasionany afloran de mis ojos flores ciegas.Y muero sana y perramente en solitario. Las miro cada tarde atareadasbuscando el verso de hoja gris que digaaquel mal de mar que no se termina.Y un desafío, un no sé qué lejano, inmenso,como una horca entonces cierra mi alma.Mis pequeñas, la práctica de buscarangustias como agujas mal se paga.Si hubieran hecho caso a sus madrastras.¡Si no hubiesen salido de sus viviendas! Tan sóloel frío irá a crecer en sus supones. ¿Camino de partida o de venidaes éste en donde estoy desatinadacon un pañuelo ausente de señal? No sé si voy o vengo pues son vagaslas sombras de los hombres y mujeresque dejan tras mis huellas sus pisadas.Atiéndeme Señor y dime adóndebajo el chubasco voy descarriada.¿A cuál de tantas puertas llamaré?
Poemas Sobre La Vida Y El Amor
Una forma magnífica de apoderarse el corazón de tu amada es mediante los poemas de amor. Las mujeres aprecian los poemas de amor bien pensados, dulces y hermosos. Los poemas de amor indudablemente van a hacer que tu novia, tu prometido o tu mujer te aprecien mucho más. Si bien no todos somos expertos en hacer poemas de amor para nuestros seres queridos, hay montones de poemas de amor famosos y muestras disponibles en Internet que puedes utilizar.
¿Voy a ser hospedadacuando el relámpago mi rostro alumbre? ¿La multitud me dará la tibia manta,el té, la charla y buena despedida? Yo solo aguardo en estas horas vagasllegar a medianoche a mi destino. Entre las sábanas enfermas, madre,te duermes sin saber de mi vigilia.Escúchame silenciar en esta horade muerte, de silencio y de agonía.Cuán sana fluye la presencia afueracon su rumor de rosas encendidas. Ayer soñé con ella.Llevada a cabo Dios Padre, espíritu y alondrame ha dicho mi Nadir que me soñabadesde su muerte, al ofrecer, la flor, la hora.Yo le llevé recién cortadas brisas.Amigo, se me ocurre que hay curiosascriaturas de la tierra donde hay huesosy almas.
Al rugirel árbol del adiós, con sus pañuelos,el último recorrido me propongo.Yo sudo. Llena estoy de rojo desafío.La luz del pueblo apaga los crepúsculosy por sus puertas entra el cosmos. Sucede que mi carne se deshojaporque ella es desde antes mi enemiga.Fallecer o envejecer. La tarde quieta,la noche tan callada en mis mejillas,me ocurren. Y me ocurre la penumbradel corazón. De niña no sabía…Me hablaban de muñecas de cristal,de la relevancia de las blancas cintasen el pelo verde, o me llevabanal cine.
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Lo mucho más bonito de estar enamorado es el silencio. Ese silencio que se crea cuando dos personas se miran a los ojos. Porque sabes que digas lo que afirmes, si bien procures decirlo de la manera más espectacular posible, jamás nada podrá acercarse a argumentar de qué manera te sientes. Tu inocencia no tiene límites, tu belleza no tiene límites, eres la única mujer en el mundo con la que me comprometo. Te miro y me quedo boquiabierto, preguntándome cómo eres mía, me dejas sin aliento querida, por ti, caminaré la línea. Fue desde ese momento nuestro amor la casadonde jamás llegó a nacer un hijo,ni mundo pasajero techo halló,si bien la mala gente a vernos vino.Si hermosa todavía me encontraranes por el hecho de que en buena tú me has transformado.
A veces me pretendo amandoa un hombre extraño que en mi perra sombraavanza cojeando y distraídoy va a toser su mal de amor en solitario. Mi corazón al colmo siempre llega.Yo peco, sí, yo pronto me extravío.Me gusta darme al vicio y la pereza.Yo canto maldiciones en mi cuarto.El mal charlar de alguna pobre viejaasmática se eleva por mi voz.La perdición de otros me contenta. Mi alma es una ramerita, Dios.No deseo querer al prójimo. La fiestade la alegría extraña añade gotasde hiel al ojo.